Novak Djokovic no disputa un torneo de preparación sobre hierba para Wimbledon desde 2019. La receta le funciona, a tenor de su victoria en las dos últimas ediciones (en 2020 se canceló por la pandemia), pero esta temporada, con el revuelo de Australia, con solo seis torneos en las piernas, la primera ronda le sirvió a fuerza de rodaje.

Entre la zozobra de Nole y el buen arranque de Soonwoon Kwon, la sorpresa planeó durante algo más de una hora sobre la Central del All England Club. Lo que tardó Djokovic en meter esa marcha más que ya no pudo alcanzar el surcoreano.

Djokovic cerró con un saque directo su triunfo por 6-3, 3-6, 6-3, 6-4 en 2:27 de partido y ya espera rival, que saldrá del duelo entre el australiano Thanasi Kokkinakis (79º del mundo) y el polaco Kamil Majchrzak (91º).

El comienzo irregular de Djokovic recordó al de hace un año, donde también cedió una manga en primera ronda ante Jack Draper, un rival que había entrado en el torneo con 'wildcard'. De ahí en adelante, no volvió a perder uno hasta la final contra Berrettini.

Pero el gran culpable de que Djokovic se sintiera incómodo durante los tres primeros sets fue Soonwoon Kwon. Decidido en la primera manga, valiente en la segunda, donde buscó ganar más metros de pista, obligó al serbio a tirar de repertorio para desarmarlo.

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